El mosaico de un ballet sinfónico
Por Luisa Ballentine
La cadencia del francés hablado se convirtió en la música que marca el inicio de la “Sinfonía fantástica”, nueva pieza coreográfica a cargo del director del Ballet Nacional Chileno, Gigi Caciuleanu, que ha conseguido llamar la atención no sólo de la crítica, sino también del público, que repleta la sala del Teatro Universidad de Chile en cada función.
A pocas horas de conmemorarse una nueva edición del Día de la Danza, el Banch consigue posicionarse como un cuerpo de ballet cohesionado, digno de ser aplaudido en cada uno de los cuadros que componen esta obra marcada por el dolor, la soledad y los personajes que viven dentro de sí mismos.
Al igual que una sinfonía musical, esta pieza de danza está formada por pequeños cuadros que completan el todo. En cada uno de ellos hay una característica especial, dada por el manejo del escenario, los colores o la destreza particular de cada uno de los bailarines.
Tal como quiso expresar Caciuleanu, el dolor abarca gran parte de la obra, y esto queda en evidencia no sólo a través de los movimientos de los artistas, sino también de los textos que se escuchan como acompañamiento musical, o a veces como único sonido, pertenecientes a los más grandes poetas franceses de todos los tiempos.
Hay una bailarina en constante fuga, una pareja de amantes, un observador anónimo y silente que anota aquello que penetra sus ojos, una mujer embarazada interpretada de modo conmovedor por Vivian Romo, y una profesora severa que entrena a un cuerpo de baile dispuesto a alcanzar la perfección.
Todos estos detalles en mosaico dan vida a una pieza única que engrandece la obra de Héctor Berlioz, en la que se ha inspirado el director del Ballet Nacional Chileno para realizar la coreografía de esta “Sinfonía fantástica”, en donde la realidad del peso de la soledad y el dolor humanos, cruza de extremo a extremo cada parte del escenario, llegando hasta las butacas y quedándose en la memoria.
La cadencia del francés hablado se convirtió en la música que marca el inicio de la “Sinfonía fantástica”, nueva pieza coreográfica a cargo del director del Ballet Nacional Chileno, Gigi Caciuleanu, que ha conseguido llamar la atención no sólo de la crítica, sino también del público, que repleta la sala del Teatro Universidad de Chile en cada función.
A pocas horas de conmemorarse una nueva edición del Día de la Danza, el Banch consigue posicionarse como un cuerpo de ballet cohesionado, digno de ser aplaudido en cada uno de los cuadros que componen esta obra marcada por el dolor, la soledad y los personajes que viven dentro de sí mismos.
Al igual que una sinfonía musical, esta pieza de danza está formada por pequeños cuadros que completan el todo. En cada uno de ellos hay una característica especial, dada por el manejo del escenario, los colores o la destreza particular de cada uno de los bailarines.
Tal como quiso expresar Caciuleanu, el dolor abarca gran parte de la obra, y esto queda en evidencia no sólo a través de los movimientos de los artistas, sino también de los textos que se escuchan como acompañamiento musical, o a veces como único sonido, pertenecientes a los más grandes poetas franceses de todos los tiempos.
Hay una bailarina en constante fuga, una pareja de amantes, un observador anónimo y silente que anota aquello que penetra sus ojos, una mujer embarazada interpretada de modo conmovedor por Vivian Romo, y una profesora severa que entrena a un cuerpo de baile dispuesto a alcanzar la perfección.
Todos estos detalles en mosaico dan vida a una pieza única que engrandece la obra de Héctor Berlioz, en la que se ha inspirado el director del Ballet Nacional Chileno para realizar la coreografía de esta “Sinfonía fantástica”, en donde la realidad del peso de la soledad y el dolor humanos, cruza de extremo a extremo cada parte del escenario, llegando hasta las butacas y quedándose en la memoria.
“Sinfonía Fantástica”
Ballet Nacional Chileno
Coreografía: Gigi Caciuleanu
Música: Héctor Berlioz
Funciones: 27 y 28 de abril, 19:30 horas
Teatro Universidad de Chile, Providencia 043
Entradas: desde $3.000, estudiantes desde $1.000
Ballet Nacional Chileno
Coreografía: Gigi Caciuleanu
Música: Héctor Berlioz
Funciones: 27 y 28 de abril, 19:30 horas
Teatro Universidad de Chile, Providencia 043
Entradas: desde $3.000, estudiantes desde $1.000
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